VITRIFICACIÓN DE OVOCITOS PARA RETRASAR LA MATERNIDAD
Teresa Ganzabal
Clínica Quirón Bilbao
El Debate del presente número es “Vitrificación de oocitos para retrasar la maternidad”. Esta posibilidad que tienen actualmente las mujeres ha sido motivo de controversia. En el próximo número de junio, el tema de debate será “DPI en enfermedades de aparición tardía”. Os recordamos que los temas de debate son permanentes, con lo cual, podéis opinar sobre ellos en cualquiera de los números.
Es llamativo el retraso de la maternidad experimentado en la segunda mitad del siglo XX. Cuando estudiaba ginecología, una primípara añosa era aquella de 30 años. Actualmente una mujer que apueste por una carrera profesional no se lo puede plantear antes.
Como mujer y profesional siempre he considerado que la naturaleza era machista en este tema, pues, mientras los compañeros de profesión no tenían prisa por completar su proyecto reproductivo, las compañeras veíamos con horror que el paso de los años corría en nuestra contra y teníamos que tomar decisiones a veces equivocadas, o cuanto menos de las que nos arrepentíamos años más tarde.
La vitrificación de ovocitos hoy por hoy es una alternativa segura que nos permite tomar una decisión tan importante en nuestras vidas de una forma más relajada, y de la que nos podremos igualmente arrepentir al cabo de los años, pero al menos tenemos esta alternativa que nos permite la fantasía de sentirnos un poco más iguales a nuestros compañeros.
A los profesionales de la reproducción, la técnica de vitrificación de ovocitos con la que tan buenos resultados estamos obteniendo nos permite también ir completando un banco de ovocitos de donantes de diferentes características y grupos sanguíneos, con la que también nos acercamos a la filosofía del banco de semen y nos hace sentir más iguales a ellos.
Ni que decir de las pacientes oncológicas que tantos quebraderos de cabeza han traído a algunos de nuestros compañeros, que han dedicado una parte muy importante de su carrera profesional a preservar la fertilidad de estas pacientes, y hoy, gracias a las buenas perspectivas que nos ofrece esta técnica, también nos acerca al varón que con tanta facilidad podía preservar la suya.
Por todo ello me parece que la técnica de vitrificación de ovocitos nos permite a las mujeres un acercamiento muy importante a la igualdad entre sexos por la que generaciones de mujeres, empezando por las sufragistas del XIX, vienen luchando.